martes, 9 de octubre de 2007

Mírame bien




Me envuelven tantas letras… Tantas…
Invisibles a los ojos del resto de la humanidad, me persiguen allá donde voy, orbitando a mi alrededor.

Todos mis pensamientos danzan en prosa, siempre, sin descanso.

Y me persigue la obsesión frustrada de retenerlos todos, de atraparlos en papeles para conservarlos siempre, como los pájaros y los peces.

Las palabras que se me escapan se me antojan trocitos de esta alma rota, que se disgrega por el camino con cada golpe de viento.

Cuanto más te acercas a mí, más de ti se empapan todas mis letras. Y me hablan de tus misterios cuando ya sólo me queda tu ausencia.

Que en cada huella me dejo medio sentimiento porque todo se me escapa por los poros de la piel, por las puntas de los dedos, y las puntas de los pies. Que no hay manera de pararlo, ni yo quiero descansar, que los excedentes se transforman y vuelven a brotar, y que no hay silencios en esta oscuridad.

Que el silencio, yo, lo tengo todo escrito.

2 comentarios:

niña de azucar dijo...

y que sigas atrapando todas las que puedas...
no te puedo imaginar sin escribir

dable dijo...

Deja escapar todas las palabras, que formen tu mensaje en el suelo, brotará una pequeña esencia de tu vida y tu deseo.